Catarata

Las puertas engalanadas con orquídeas
un melodioso silencio llamándome,
la duda me desalentaba,
pero pudo más la voz del viento…
voz que sería mi guía confiable.

Abandoné así el camino de lastre,
y con él, todo conocimiento inútil;
me dispuse a entregarme
sin mas cuestionamientos.

Mi ser natural despertó inmediatamente
ante el llamado
de lo desconocido para mí,
inherente para él.

Todo fue fluyendo,
encontré el sendero entre el riachuelo,
el equilibrio se apoderó de todo,
me di cuenta entonces…
cargaba mucho más de lo que necesitaba.

Al incorporarme
me disculpé ante las rocas,
y así, los árboles generosos
me dieron paso a través de sus raíces,
y todos los ojos,
(que curiosos me observaban temerosamente)
confabularon en mi protección.

Tuve deliciosas tentaciones,
detener mi paso ante oasis de roca y agua;
agradecí por ellos,
pero él sabía que necesitábamos llegar más lejos…

Mi alma explotó en regocijo,
de mis labios emergió un grito incomprensible,
todas las criaturas acudieron a presenciarme.
Toda aquella imponencia ante mí.

Fui curado,
liberado
y renacido
en aquel lugar

Aquel maravilloso lugar…

El tiempo se detuvo ipso facto,
y solo me regocijé
entre juegos, rituales y pureza.

La pureza de aquel maravilloso lugar.

LuCasMen